Pasar a la acción valiente ha sido importante históricamente, pero más aún en estos tiempos entre pantallas, en los que el voluntariado y el fundraising son más digitales que nunca. Tu entidad sin ánimo de lucro verá su propósito morir si el equipo no se implica en la causa. Esto es evidente pero, ¿cómo implicar a todo el equipo en la captación de fondos y superar todas las resistencias?
El voluntariado es una de las piezas fundamentales de las entidades sociales, habitualmente constituye una base social comprometida que da sentido a los fines de las organizaciones.
De acuerdo a los datos del Observatorio de la Plataforma del Voluntariado, en España hay 2,7 millones de personas voluntarias, siendo su perfil mayoritario mujer, de entre 34 y 45 años, con estudios superiores, menores a su cargo y alrededor de cinco años de experiencia en voluntariado social. Durante los tiempos de la pandemia se ha incrementado esta actividad, más de dos millones de personas que no eran voluntarias hoy lo son.
Teniendo en cuenta estas cifras, de ninguna manera podemos dejar de contar con el voluntariado a la hora de captar fondos, actividad principal para la sostenibilidad económica de las organizaciones del Tercer Sector.
Las personas que son voluntarias en tu ONG conocen de primera mano las necesidades de la entidad, trabajan de forma continuada y mano a mano con la población beneficiaria y tienen información de los avances, así como de los retos pendientes. Si todo este conocimiento real y completo, y este compromiso con tu causa, se transmite a potenciales donantes de forma directa, puede impactar sobre ellos y enamorarles. Darling, ¿No te parece que aquí hay una graaaan oportunidad?
Si lo has visto claro y quieres pasar a la acción, he preparado un listado de las claves que es necesario tener en cuenta para crear y consolidar un equipo de voluntariado sin vergüenzas y con actitud fundraiser:
1) Un casting del fino. Selecciona a las personas voluntarias bajo unos que, en principio, no elegirías a un asesinx confeso como pareja, a la hora seleccionar quién formará parte del equipo de voluntariado de tu entidad, unos criterios establecidos, claros clarinetes. Por ejemplo, es importante persona voluntaria comulgue con los valores y principios que rigen la tenga interés y motivación por el colectivo con el que va a realizar las voluntariado. Pregúntate, ¿quién es tu voluntarix ideal?
2) Formación continuada y adaptada a su perfil. Se trata de uno de los recogidos en la Ley española del Voluntariado, que les otorga a las personas voluntarias el derecho a la orientación y formación relacionada con las van a llevar a cabo. En primer lugar, deben conocer muy bien la principales programas, sus valores y estilo de comunicación, sus económicas, su estructura interna. En segundo lugar, deben recibir específica sobre captación de fondos, deben conocer cómo manejar las donantes en todas las fases: cultivación, petición y fidelización. Por ejemplo, Caritas Barcelona y Cruz Roja Española ya han apostado por la formación de sus voluntarixs en el método ‘El arte de pedir’ mediante el programa MotivaACCION.
3) Objetivos y seguimiento. Marcar objetivos y seguirlos es necesario para conseguir resultados y que la persona se sienta motivada con la acción voluntaria. Su tarea es voluntaria, pero por el bien de la entidad y para su satisfacción como contribuyente a la causa que os une, es importante hacer este seguimiento, que da sentido a la colaboración y la hace medible.
4) Chútales MotivaACCION. La persona voluntaria es un valor para la organización y un altavoz de las acciones de la misma de cara al exterior, así como un potencial fundraiser. El café para todos no funciona. Mantenerte cerca de cada persona voluntaria, acompañarle en su labor, apoyarme de forma continuada, caso a caso, entendiendo las bondades y fortalezas de cada persona; hará que la confianza y la relación se vean reforzadas y multiplicará su motivación y su predisposición a la acción
voluntaria.
5) Ayúdales a vencer las excusas cutres para no pedir. Debes convertir a tu equipo de voluntariado en pedirólogxs profesionales sin vergüenzas. Prepara un argumentario anti-objeciones para que, en caso de encontrarse con un potencial donante, tus voluntarixs lleven cargadas las pilas y sientan por dentro el color de la causa que abanderan. Este argumentario será una herramienta ideal a la hora de enfrentarse a peticiones cuando surjan oportunidades de captación de fondos para la entidad.
6) Ponles la alfombra roja para que se sientan especiales, porque lo son. Informa a tus voluntarixs de todo y más, interésate por ellos y apórtales; son la pandilla vitamina de tu entidad y representan su voz. Asegúrate que conocen bien el relato de la organización, los valores, el código ético, las vías de colaboración y que saben pedir con arte y soltura, sin vergüenzas.
Siguiendo estas recomendaciones reforzarás la actitud fundraiser en tu equipo de voluntariado y no perderás oportunidades de captación de fondos cuando se encuentren con potenciales donantes. Recuerda que el voluntariado es un activo fundamental en tu entidad social.
Cuéntame, ¿cómo lo estabas haciendo hasta ahora en tu entidad? ¿hay alguna otra clave que te funciona?